¿Qué buscan si todos tenemos la misma cara cuando vamos al excusado?


¿Qué buscan si todos tenemos la misma cara cuando vamos al excusado?
Todos los sistemas de inteligencia del mundo deben ser eliminados
Por Fabián Núñez Baquero
05/07/13

Con el valiente y heroico desnudamiento a los servicios de inteligencia de la NSA-CIA, Edward Snowden ha destapado el pozo séptico de las oficinas dedicadas al espionaje en todo el mundo. No sólo es Francia o Israel, EEUU o las élites del orbe capitalista las que practican esta vergonzosa actividad, sino, puede decirse, sin menoscabo de las pocas excepciones que pueden darse, la totalidad de las clases dirigentes del capitalismo en el planeta. La sociedad de pronto se ve como si un ojo inmóvil1 e indecoroso estuviera en su retrete a cada momento que la naturaleza nos llama a cumplir con nuestras necesidades biológicas o en nuestra alcoba cuando desnudamos nuestros cuerpos para el descanso. No sin indignación cada persona le gustaría gritarles: ¿¿Qué buscan si todos tenemos la misma cara cuando vamos al excusado? Cada momento de nuestra vida la policía internacional- mal llamada de inteligencia-está monitoreando cada gesto, cada palabra, cada declaración realizada por nosotros ya sea por el teléfono tradicional, el móvil, o las cadenas sociales como Facebook, Google y otras.

Esta tarea sucia de las policías del globo tiene una doble cara: una muy seria y otra por demás jocosa. Empecemos por la jocosa: con la lupa de los pesquisas a nuestro humilde hogar ¿qué podrán recoger? ¿Las tripas del hambre cotidiana? ¿ O, acaso, la radiografía del desempleo? Es posible que puedan detectar el miedo que tiene el maestro a perder su “contrato” de empleo, ya que hace fu perdió la esperanza de que le otorguen el nombramiento. Pueden ver también la ropa mojada producto del último aguacero que agujereó el techo del proletario del suburbio. O, quizás, el crujir de huesos porque ya no hay para pagar el almuerzo del día y nos tenemos que conformar con el café con medio pan. ¿ O talvez pueden ver los preparativos de la muchachita que sale a “buscarse la vida” y que está preocupada porque le faltan afeites y un poquito de colonia? ¿ Qué más pueden ver? ¿Las cobijas de hace un siglo? ¿Los colchones que asoman las encías de los resortes? Los alambres con calcetines agujereados? No hace falta telescopio para mirar nuestros harapos ni cámaras digitales para fotografiar el hueso que nos sale por las costillas. Paren el rollo, pesquisas desnaturalizados.
La seria es la utilización de gigantescos recursos económicos, tecnológicos, científicos, humanos para un quehacer ominoso y estéril: una pesquisa a supuestos “terroristas”, de entre miles de millones en la Tierra, quienes estarían preparándose para una supuesta “guerra terrorista” o para ser más exactos, para justificar los miles de millones de dólares que utilizan los indagadores, que meten la nariz en todo, en la chistosa lucha contra el “terrorismo internacional”.

Usan Aviones adrones, satélites, computación, alta tecnología basada en la ciencia cuántica y electrónica, que mucho sacrificio y penurias costó a los científicos, para que ahora vengan a utilizarla en esta candonga macabra. Y entonces el imperio- de manera ciega o porque escuchó inevitables críticas a su labor de hambre y de violación de derechos- enviará aviones no tripulados para asesinar, masacrar a miles en todos los continentes. Y en cada país el presidente de turno se apoyará en los datos pesquisados para reprimir a la población pobre, a los obreros sin trabajo, a los desocupados que lo piden y lo buscan y, sobre todo, a los periodistas que denuncian la corrupción o la degeneración de regímenes capitalistas disfrazados o no de izquierda. Pero no se quedan ahí, escrutan los mercados tecnológicos, el comercio, los nuevos inventos, obras literarias, modas, noticias nuevas, todo lo someten al chalaneo del vivanderismo de la ganancia, del beneficio privado.
Como se sabe el capitalismo es un sistema de nación-estado basado en fronteras y en patriotismo. Entonces se da otro justificativo: hay que acechar para evitar espías extranjeros, la patria tiene que ser cuidada, hay que precautelar sus fronteras, su integridad territorial, sus símbolos, “su ciencia y tecnología”. Ergo, es necesaria la policía inteligente. Si Assange fuera peruano seguro no estuviera de asilado en la embajada del Ecuador. Si un humilde hacker hacckea al presidente o al ministro del mismo país,entonces debe ser sometido a juicio y sancionado. Pero si pertenece a otro país, entonces es posible apoyarlo y hasta felicitarlo.
Lo que se ve, desde luego, es que el espionaje y los espías son parte esencial y consecuencia de la sociedad capitalista basada en la nación-estado y la propiedad privada. Si hay una simpatía y apoyo por Assange y Snowden es porque el imperio- a quien han desenmascarado- no sólo que demuestra ser una bestia mundial, sino que esta bestia ha cometido genocidios y sigue haciéndolo, además que es la causante del hambre, las drogas, la violencia, la trata de blancas y la suprema injusticia en todo el mundo. Se defiende a Assange y a Snowden porque han puesto en evidencia al imperio capitalista que es odiado por todo el mundo. Pocos pueden ver la injusticia y abuso de sus propias autoridades nacionales, pero les es fácil observar al monstruo inverecundo mundial. Los latinoamericanos y talvez los del ALBA ven en la administración Obama sus enemigos directos porque ellos obedecen a la CIA y al Pentágono y a los de más arriba, la élite de ricachos delos bancos y las transnacionales. Quieren un sistema capitalista gobernado por latinoamericanos, un FMI, una OMC, un Banco Mundial, quieren ricachos, OEAs, ONUs pero que sean latinoamericanas. No desean extirpar el capital, la propiedad privada, sino que el capitalismo funcione con etiqueta Made in Latinoamérica. Pero a los pobres y trabajadores nos servirá de poco el cambio de nombre al capital, de la misma manera que les sirvió de muy poco a los artesanos y pobres de la época, el cambio de españoles a criollos que fue la denominada guerra de “independencia” en el siglo XIX.
Lo inevitable sin embargo es la conclusión: si no queremos que nos espíen hay que eliminar el sistema que procrea la necesidad de espiar. Si no deseamos estar en el váter a cada rato es imprescindible eliminar todos los sistemas de inteligencia de todo el mundo, desde el de Putin en Rusia hasta el de Ecuador de Correa.
En el ínterin, por supuesto, hay que felicitar a Fidel Narváez por salvar a Snowden a pesar de que por este gesto heroico y generoso el régimen de Correa lo vaya a sancionar. Entiendo que ya Correa no irá a regalar los 23 millones de dólares a EEUU para que “aprenda derechos humanos”. Solo unos pocos cientos bastarían para agradecer a Narváez su vigorosa defensa a tiempo de los derechos humanos de Snowden. Y aunque talvez el régimen de Correa haya dado marcha atrás en el asilo de Snowden hay que aplaudir el recurso retórico, el buen discurso anti- imperialista, de esos que acostumbraba Castro en sus tiempos cuando fumaba habanos y que ahora Correa también los hace, tal cual los hacía Chávez, con su propio estilo aunque sea muy costoso para el país.


1Creo que El Ojo Inmóvil es un cuento que publiqué en mi libro Otra Vez Léntula en la década del 60 o 70 del siglo pasado, tratando a manera de ciencia ficción el horrible control del Estado sobre cada individuo



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