Hay causales para juicio político, destitución y sentencia de Correa


Lucha de clases en Grecia


Hay causales para juicio político, destitución y sentencia de Correa
Y otras conclusiones de la lectura del libro “El discreto Encanto de la Revolución Ciudadana”

Por Fabián Núñez Baquero
18/03/10

La valiente y lúcida denuncia realizada por Fernando Villavicencio, dirigente de los trabajadores petroleros, al nuevo festín del petróleo proporcionado en bandeja por el régimen de clase media capitalista de Correa a las transnacionales capitalistas, determina con nitidez las causales para un juicio político y la consiguiente destitución de Correa. “El Discreto encanto de la Revolución Ciudadana”, es un libro que debe ser estudiado por todo hombre y mujer honestos en la meta de pedir cuentas a todos los involucrados en este macabro festín. Es un libro que debe constituirse en inevitable memoria y referencia para el juicio y la sanción de todos los protagonistas, delincuentes, cómplices y encubridores del más grande pillaje de recursos del estado perpetrados por un gobierno y por gentes que todavía tienen la avilantez de llamarse socialistas.
Pero no es una Asamblea gobiernista de Alianza País, incondicional e impotente con el Jefe, la llamada a realizar esta fiscalización del régimen y su eventual juzgamiento y sentencia. Tampoco buitres advenedizos que defienden la propiedad privada, y los bancos y los medios privados, que son furibundos antisocialistas y que se están preparando para el próximo asalto eleccionario. Tampoco los venales aliados de Correa, el partido comunista, cuyo brazo sindical, la CTE liderada por el provecto y avezado Santiago Yagual, el también estalinista MPD y sus halcones negros, la clásica y contrarrevolucionaria burocracia sindical y todos los movimientos sociales y políticos denominados de izquierda que lo apoyaron y que se encuentran usufructuando su cuota de poder. Sólo la clase obrera revolucionaria organizada en partido y con una política socialista internacional podrá hacerlo, como parte de su lucha por la toma del poder.

Son más de 300 páginas de texto que rebasan la peor pesadilla de terror y de asco que pudiera proponer una novela negra o un teatro del absurdo. Al terminar de leerlo uno no puede evitar el vómito, la rabia y la convicción de que se debe acabar con el sistema de la esclavitud salarial y de la intrínseca corrupción basada en el capital en todos los continentes. Por ahora nos vamos a restringir a realizar un parvo resumen de las acusaciones bien fundamentadas de Villavicencio, y con documentos que, a nuestro entender, justificarían un juicio político, la sentencia y destitución de Correa.
1.El gobierno de Correa y la marina regalan el campo petrolero Sacha a la compañía venezolana PDVSA ( Operaciones Río Napo)SIN QUE ÉSTA APORTE UN SOLO CENTAVO y la convierte gratuitamente en compañía explotadora del crudo ecuatoriano sin que esta empresa haya movido un sólo dedo. Sacha produce cerca de 50 mil barriles de petróleo diarios, cerca del 30% de la producción global de petróleo ecuatoriano, con más de 200 pozos perforados, y con una impresionante infraestructura e inversión del Estado de miles de millones de dólares. Este regalo a PDVSA equivale a 4.2 millones de dólares mensuales y 50 millones de dólares anuales.
2.Correa y los oficiales de la Marina han permitido que empresas como PDVSA y Petrochina sirvan de intermediarias para que “grupos mafiosos”- la expresión es del mismo Correa- como Trafigura, Glencore Taurus Castor Oil ( conocidas en el mundo por su condición de chicas malas), comercialicen petróleo,derivados y gas licuado, pasando por encima de licitaciones y reglamentos causando enormes perjuicios a la nación.
3.Más de 10 millones de dólares habría regalado Correa a PDVSA- Petromar- Trafigura en la comercialización de l'200.000 barriles de diluyente cutter stock. (PDVSA compra a Trafigura, ésta compra a otro intermediario y luego lo vuelve a vender a PDVSA!)
4.Correa ha permitido un perjuicio de 35 millones de dólares de PDVSA a Petroecuador por manipulación y rechazo de fuel oil que fuera contratado y rechazado en diciembre del 2008 sin ninguna razón técnica por PDVSA
5.Correa y la Marina del Ecuador consienten y respaldan la violación de la soberanía nacional por PDVSA venezolana cuando ésta impone condiciones de comercialización a Petroecuador y esta tiene que asumir pérdidas como en el caso de la venta de fuel oil el 12 y 18 de abril del 2009 en Bonaire.
6.Correa y la marina permiten que PDVSA realice negocios de petróleo ecuatoriano a terceros con rentabilidad grande para PDVSA y perjuicios de centenas de millones de dólares para Petroecuador, es decir, para la nación.
7.Correa y la marina del Ecuador permiten y respaldan la venta de nuestro petróleo para enriquecer a Petrochina con el anzuelo para bobos de un crédito de 1000 millones de dólares que nunca se concretaron. Y que, incluso, si se realizaría, lesionarían la soberanía y la economía del país.
8.Correa y la marina entregan a las empresas petroleras campos con reservas comercialmente explotables y en plena producción. Es decir,impidiendo la reinversión de capital en Petroecuador y sin que aquellas inviertan ni arriesguen absolutamente nada.
9.La responsabilidad del régimen de Correa en esa colosal vergüenza y saqueo multimillonario de la riqueza nacional por parte de la empresa brasileña Odebrech- que el magistral ensayo de Christian Zurita Ron saca a luz- exige la fiscalización al régimen de la revolución ciudadana y a regímenes anteriores que la solaparon.Cientos de millones de dólares se ha llevado esta empresa en la realización de proyectos inútiles como el San Francisco mediante heddiondos contratos bajo llave.
10.Correa es directamente responsable por la entrega de un negocio de miles de millones de dólares que reporta el negociado de las empresas de telefonía móvil Porta del multimillonario mexicano-libanés Carlos Slim y la Telefónica ( Movistar) de España. La colusión de Correa con Felipe Calderón, lacayo de Slim y con el rey de España, sirviente de la Telefónica, sería un secreto a voces y la causa de la complicidad de Correa con este negociado.
11.La colusión y encubrimiento del régimen a Fabricio Correa, hermano del presidente quien, por su propia boca, se auto denuncia al aceptar que su hermano conocía de sus contratos por más de cien millones de dólares con el estado y el uso consentido de su influencia y su autoridad.
12.De igual manera, luego de denunciar a José Capelo como un gánster del medio ambiente con su empresa Ecuavital y quien presumiblemente mandaría a boicotear y perjudicar el oleoducto para luego presionar que se le otorgue jugosos contratos de millones de dólares para remediar el medio ambiente, Correa no hace sino encubrirlo y no realiza ninguna medida práctica para juzgarlo.
13.Premia a Repsol- YPF con la extensión de siete años más de operaciones, cuando el contrato leonino de esta empresa se caduca y cuando el estado podría beneficiarse con el 100 por 100 de una producción de 50 mil barriles de petróleo por día.
14.Correa y la Marina permiten y encubren el atraco de la empresa brasileña Petrobrás de los bloques 18 y 4l del Campo Azul, en asocio con las empresas Petro Manabí y Cayman de los hermanos Isaías que defraudaron al estado en más de 1400 millones de dólares y que se encuentran prófugos de la justicia y que merecen una confiscación de todos sus bienes y la extradición para juzgamiento penal.
15.Correa y la Marina firman un contrato lesivo a los intereses del país con la Cia. Ivanhoe Energy Ecuador Inc sin licitación ni concurso de precios
16.De igual manera Correa otorgó a dedo y rapidito el Bloque 4 de la Isla Puna a PDVSA para contratos de sísmica aduciendo que existe mucho gas, que hasta el momento no se ha encontrado

Lo que está presente en este resumen mínimo es la agresiva privatización del petróleo y gas a cargo de un convencido demócrata cristiano y católico practicante como Correa, un maestro de la principal universidad burguesa del Ecuador como es la Universidad San Francisco de Quito, alguien que reza y canta el nacionalismo y la soberanía como el beato el rosario, quien, además dijo que no permitiría las nacionalizaciones, que impediría el ataque a la clase obrera, que no pagaría la deuda externa y eliminaría la explotación y la intermediación laboral, alguien que canta al che Guevara, viaja a Cuba como el musulmán a la Meca y que termina cada discurso con eslóganes de la guerrilla castro-guevarista. Y sobre todo,quien ha sido capaz de neutralizar la denominada izquierda y a grandes sectores del campesinado indigenista a su favor. Alguien quien pretende eternizar una dictadura de clase media capitalista, como el coronel Chávez ha impuesto la dictadura del capital financiero y bancario y la temible burocracia militar,estatal y sindical venezolana. Es, en definitiva, la coherente actividad pro capitalista de Correa que surge de su ataque sistemático a la clase obrera, de la negación reaccionaria del socialismo científico y del materialismo dialéctico y de su incapacidad orgánica de entender principios y nociones abstractos que determinan la interconectividad de todos los fenómenos en una unidad dinámica y cambiante del todo con las partes de un mismo sistema capitalista integrado y movido por la célula de la ganancia y por los opuestos irreconciliables: el proletariado y la burguesía. Sólo entiende la política como negocio, como marqueting y propaganda, como eternización de un sistema de oprobio, de lucro y desigaldad.

Las acusaciones – conforme al esquema jurídico y la ideología del régimen burgués- confluyen en la denominación global de “traición a la patria”, por la venta y regalo de la soberanía nacionales, tráfico de influencias y sometimiento a gobiernos y transnacionales extranjeras en detrimento de los intereses de la nación y el pueblo del Ecuador. Dentro del propio ámbito del capitalismo nacional y la democracia burguesa, se puede y se debe procesar a Correa. Sabemos que es necesario pero no es suficiente. El libro no saca estas conclusiones, nosotros lo hacemos. Porque no es un problema individual sino un prooblema de clase.
Además nos permite reafirmar las posiciones del socialismo científico en lucha por la eliminación de la propiedad privada de los medios sociales de producción, la absoluta desconfianza en liderazgos patrioteros nacionalistas, la construcción de una dirección revolucionaria basada en el socialismo científico y en la movilización independiente del proletariado respecto a cualquier vertiente burguesa criolla y la necesidad misma de la movilización de la clase obrera y pobres por la revolución socialista en Ecuador, América Latina y el mundo.

Debe ser claramente determinado que este libro histórico- que debe ser leído con pasión y fría cautela por todos los que aún no son contaminados por la vehemencia de la ganancia- no puede ser entendido cabalmente si se lo hace bajo la torcida óptica de una nebulosa sociología basada en el tartamudeo al infinito de Michael Foucault o del odio visceral de Zizek al marxismo, sino con la perspectiva nítida de la dialéctica revolucionaria.

Y esto porque todo lo que denuncia Villavicencio no es sino una malsana pero obvia prolongación de la corrupción esencial que es propia del único salvaje sistema capitalista que existe ahora. Los regímenes de propiedad privada como los del nepotista coronel Gutiérrez ( quien odia al socialismo más que el periodísticamente presidenciable señor Carlos Vera o el célebre defensor de la banca privada, señor Jorge Ortiz), Abdalá Bucaram- acusado de robarse en costales el dinero del estado y otros delitos de peculado por las altas instancias de la misma función jurisdiccional- Jamil Mahuad ( el primer negociador del Trole y eximio dolarizador), Febres Cordero ( quien fuera dueño y señor del sistema de justicia), Rodrigo Borja ( el clásico fustigador de la clase obrera), Gustavo Noboa (amnistiado antes de hora por Correa y con serias responsabilidades en su función) , Durán Ballén (el de los negociados de las flores y de la miel y del petróleo), y un largo etcétera. Todos ellos perjudicaron al proletariado , en muchos casos- como el de Velasco Ibarra, por ejemplo- inclusive no para el enriquecimiento de ellos mismo sino, sólo para beneficiar casi siempre a un miserable puñado de capitalistas nacionales y extranjeros. La propiedad privada, la fiebre del enriquecimiento rápido, el vicio del agio y la ganancia está detrás de todo el sistema de corrupción política, social y económica del capitalismo.

El excelente libro de Villavicencio nos permite ver el por qué no es una política de economía mixta del Polo Democrático o del capitalismo aguado de la Red de los señores Roldós,mucho menos el apoliticismo o la improvisación de las Asambleas Populares y el correismo, las que pueden dar una salida revolucionaria al cáncer del enriquecimiento individual y la desigualdad del modo de producción actual. Nos permite acentuar la necesidad de un liderazgo de equipo, no de un caudillo burgués, necesitamos un liderazgo colectivo de clase obrera con políticas del socialismo internacional para castrar, impedir la superfetación de la metástasis del capitalismo en el clímax del declive y que sólo sobrevive por la traición sistemática, consciente de direcciones burocráticas sindicales, estalinistas y a veces del marxismo. Sólo un partido marxista real no cae en los espejismos de caudillos nacionalistas como Correa o Gutiérrez que movilizaron a la burocracia sindical, estalinismo, movimientos sociales e izquierdistas en su apoyo.
También podemos ver que no hay salida nacional a la crisis mundial del capitalismo. El libro plantea una problemática visible en toda América Latina, por eso debe difundirse en todo el continente y en el mundo. La conexión entre la necesidad de la revolución socialista en cada país y la mundial es perfecta y nítidamente visible- aunque en forma negativa- por los mismos antecedentes que han dado origen a la vehemencia de la privatización correista:

En 1992, casi coetánea a la restauración del capitalismo por la burocracia estalinista en Rusia y Europa del Este, se inicia la “era de la privatización” de las empresas estatales en Ecuador con el nombre de “Modernización del Estado”, siendo la otra cara la flexibilización laboral y el ataque a las conquistas de los trabajadores. Así como los estalinistas rusos y chinos se transformaron en capitalistas rojos y peones del imperio, en Ecuador todos los gobiernos, desde Rodrigo Borja,Sixto Durán Ballén y Febres Cordero en adelante compiten en la carrera de quién da más empresas petroleras, concesiones mineras y más regalos a las empresas transnacionales a cambio de módicas coimas o regalitos insignificantes a la burguesía criolla.La traición del estalinismo a la clase obrera internacional al restaurar el capitalismo, con Gorvachov y Yeltsin, dio luz verde a los ataques del capitalismo a escala global y quitó el piso esas direcciones mitológicas y oportunistas de la pequeño burguesía que veían en Rusia un sustituto de dios o la Virgen María, el Papá Noel que regalaba fondos y hacía trueques favorables. Estos oportunistas obraron igual a escala internacional y ayudaron al desarme y la liquidación de la organización de la clase obrera.Lo que cayó en Rusia y Europa del Este no fue el socialismo sino su opuesto negativo: el estalinismo.Lo que se hizo añicos con la caída del Muro de Berlín no fue el socialismo científico sino el nacional socialismo, el utópico y contrarrevolucionario programa de socialismo en un sólo pais. Por manera que la revolución mundial no es un mero recurso publicitario del socialismo científico, sino una necesidad absoluta ante la desintegración degenerada del sistema de las ganancias.

Se puede constatar que las transnacionales se valen del sistema de nación- estado, las leyes y su correspondiente gobierno burgués en cada país para alimentar la voracidad de la ganancia y el expolio. Esto es perfectamente visible en casos como el de Petrobrás y su ángel tutelar, Lula da Silva, el burócrata sindical capitalista, PDVSA y su protector, disfrazado de socialista, Hugo Chávez, Petrochina y los sinvergüenzas capitalistas rojos chinos, Texaco- Chevron y su régimen podrido imperial. Utilizan, de la misma manera, las leyes y burguesía de su país de origen para defenderse de cualquier reclamo que realicen los pueblos.
De hecho hay un sistema imperial capitalista, con leyes,fronteras, fuerzas armadas e instituciones internacionales, estructurado para la defensa de la propiedad privada de los monopolios, el sistema financiero y bancario. Las guerras entre países son creadas bajo el látigo del interés de los amos de las transnacionales, como el caso de Cheney y la Halliburton en Irak, o el enfrentamiento con el pueblo palestino que beneficia a los barones del sionismo internacional.

En la práctica este imperio unipolar-materializado en entes como la ONU, OEA, OMC, Fondo Monetario, cascos azules de la ONU, Banco Mundial, OIT y una caterva de ONGS de variedad infinita, así como los gobernantes patrioteros burgueses en cada país,sirven a los monarcas de las acciones, el comercio internacional, las materias primas, la industria y la comunicación global quienes son dueños absolutos de sus propias transnacionales y, por evidente gravitación, de gobiernos, ejércitos y estados.
Pero, por eso mismo, la base del sistema de nación -estado en que se amparan debe ser destruido para destruir a la vez el dominio del capital y de la sacrosanta institución de la propiedad privada sobre los medios de producción en que se basa la democracia capitalista. De tal manera que no es faltar a la verdad si decimos que Correa , la marina y la burguesía capitalista ecuatoriana trabajan para enriquecer, por ejemplo, a Carlos Slim, el dueño de Porta o al mismo Gánster – la palabra es dedicada por el mismo Correa- José Dapelo-. Y ambos gánsteres se basan en el estado de su país para ampararse de sus latrocinios que cometen en otros países. Se sirven del patriotismo, la base del estado, la clase dominante, sus leyes- en las cuales dominan personajes como Washington Pesántez-, para el saqueo sistemático de la riqueza creada con mucho esfuerzo por el proletariado mundial.

Ya desde hace más de 150 años Karl Marx dijo que el estado no es más que una oficina de negocios de los capitalistas. Éstos utilizan la empresa pública o privada, la mixta, las concesiones o hasta el trueque con el fin de enriquecerse y para eso les respalda su estado . Y mejor si se disfrazan de socialistas porque ahí tienen el respaldo de los dirigentes obreros ciegos y de la base de los pobres obreros y campesinos enceguecidos por los ciegos de conveniencia.
El estado y la burguesía son los oponentes sólidos, los enemigos clásicos contra la igualdad socialista y el gobierno obrero- campesino en Ecuador, que nos hace falta. Hay que acabar con ellos para lo cual es necesario la dirección marxista que guíe- con un programa y principios socialistas- al proletariado más numeroso actual desorganizado y en desempleo y al campesinado a la revolución socialista con los métodos de la lucha de clases. Como este extraordinario libro nos permite generalizar, no hay en realidad nada que inventar, la necesidad real está presente frente a nuestros ojos: en lugar que nos saquen los ojos el puñado de cuervos que nos canibalizan junto a nuestros hermanos emigrantes y la clase obrera en otros países, todavía es real, auténtico, urgentemente necesario, el llamado de Marx: “Proletarios del mundo uníos”, yo añadiría, pero no para el sindicalismo y la permanencia de la esclavitud salarial, ni para mejorar el dogal del trabajador,sino para la liberación definitiva del proletariado y con él de la humanidad en su conjunto.

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